Ja ja ja ja ja ja… Sinceramente, NI PUTA GRACIA.
¿De qué se ríen ustedes cuando ven vídeos o programas japoneses?. “ Es que tienen la cabeza enorme” “tienen un pene minúsculo” “son los ojitos de dormidos” “es que son todos iguales” ”son unos pervertidos porque le meten mano a las niñas en el metro y porque sus fantasías son siempre con colegialas tetonas y ardientes” “parece que no le duelen las hostias” “Quizás sus esposas son más sumisas y abiertas, de manera que no habría problema en desarrollar mi filia y meterle una sandía cuadrada por el ano” .
Lo sé, estos pensamientos y otros se nos han pasado muchas veces por la cabeza, pero quítense esas ideas de la cabeza porque aquí los chinorris son mucho mejores que TÚ (…y que tu madre también).
Con esas cabezas tan grandes son los artífices de la mayoría de los elementos de ocio y tecnología con los que te diviertes (…si, los vibradores también). Son la competencia directa en cualquier sector, y pronto harán mejores paellas que los propios valencianos. Ustedes sigan intentando mejorar su inglés, que les va a ser muy útil para NADA. Dentro de muy poquito los Americanos pasarán a ser segunda potencia, y sus pequeños penes serán más importantes que los clásicos modelos pornos caucasianos.
Son muchos más (¿se han dado cuenta?), y hay mucho chiste fácil y leyendas pencas sobre saltos conjuntos, cuescos colectivos y superpoblación. Les digo que no hace falta ser tan infantiles, como todo oriente se ponga a pegar hostias les aseguro que cabemos a más de diez por cabeza. Como son tantos, el consenso entre estas personas es irrevocable teniendo en cuenta “el poder” del resto de las naciones.
¿Son muy payasos verdad? Se dan golpes, se quedan dormidos, se gastan bromas muy pesadas para… ¿para quién? No creo que a ellos les haga ni puta gracia parecer tan ridículos, así que cabe cuestionarse que sea para que creamos que son así de simples, pero la simplicidad está en ver la tele y decir ”¡Írua, la hostia que sa pegao er colega!¿abe?”.
Sé bien que todos tenemos esa imagen de el programa mitiquísimo de T5, pero los que tenemos conciencia de esa época sabemos que la gracia no estaba en las pruebas crueles o en los inmensos trompazos, sino en el surrealismo de los comentarios.
El humor verde es el que se vale de las referencias picaronas, el humor negro es el que toma de base el mal gusto, el humor blanco son los chistes cándidos y sencillos, y el humor amarillo es el que usan los orientales para reírse de los occidentales sin que ellos se den cuenta.
Desde Ojo de Pez esperamos hacer reír a los orientales con nuestras tiras y no con nuestra falta de sentido común.